Una movilización popular y ciudadana contra la extrema derecha
Por Heber Ostroviesky*
La victoria del Nuevo Frente Popular, que se alzó como primera minoría en las elecciones legislativas francesas trajo alivio. Dejando en segundo lugar al partido de Macron y tercero, contra todo pronóstico, al partido de extrema derecha liderado por Marine Le Pen, el NFP enfrenta ahora el reto de mantener su cohesión en una Asamblea dividida. ¿Logrará formar un gobierno estable, cumplir su ambicioso programa y reconquistar el apoyo de los sectores rurales en este complejo escenario político?
* Investigador de la Universidad Nacional de General Sarmiento.
© Le Monde diplomatique, edición Cono Sur
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