Internet a la hora del desencanto
Por Derrick De Kerckhove*
Presentada durante mucho tiempo como el signo de una nueva era, a Internet se le atribuían todos los méritos. Particularmente, el de abrir el camino hacia una nueva era económica -gracias a la net-economía- donde el enriquecimiento sería permanente, instantáneo y exponencial. Era un espejismo. Y como otros espejismos, la carrera hacia la Red resultó una gran decepción: decenas de empresas desaparecen, miles de asalariados son despedidos. Algunos hablan de tirar Internet a la basura. Pero ésa también parece una reacción excesiva.
* Director del Programa McLuhan en cultura y tecnología, universidad de Toronto (Canadá). Autor de "The Architecture of Intelligence", Birkhauser, Basilea, 2001.
Traducción: Pablo Stancanelli
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