Denunciar al poder cuesta caro
Por Olivier Piot
En África, son cada vez más los alertadores que, desde las sombras, libran una peligrosa batalla contra la corrupción y las prácticas ilegales. En países donde otros modos de expresión democrática, como las elecciones transparentes o la libertad de prensa, se ven entorpecidos o están viciados, señalar las infamias de quienes controlan el poder constituye un último acto de resistencia.
null Traducción: Georgina Fraser
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