La suma de todos los equívocos
Por Sergio Cesarin*
El ascenso de China es resultado de un giro pragmático hacia el capitalismo y del reemplazo de la vieja utopía comunista por una nueva fe de Estado: el confucionismo. Por eso resulta absurdo concebir a China como un enemigo, como piensa Javier Milei, y es necesario establecer una relación diplomática inteligente.
* UNTREF-CONICET. Autor, junto a Carlos Moneta, de Tejiendo redes. Estrategias de las empresas transnacionales asiáticas en América Latina, UNTREF, Buenos Aires, 2012.
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