La responsabilidad colonial belga
Por Colette Braeckman*
Entre 1920 y 1962, Bélgica administró Ruanda, apoyándose particularmente en los misioneros católicos. Impregnados de las ideologías raciales, estos colonizadores impusieron las categorías “étnicas”, terreno fértil para el genocidio de los tutsis en 1994.
* Periodista, Le Soir, Bruselas.
Traducción: Emilia Fernández Tasende
Accedé a todo el contenido por solo $3800 por mes.
Para acceder a este contenido debes tener una Suscripción Plus (edición mensual + archivo).Si aún no posees una, puedes adquirirla aquí.
Si ya tenés cuenta accedé aqui
Más notas de la edición Edición MAYO 2021
Destacadas del archivo