Australia, la potencia discreta
Por Olivier Zajec*
El primer ministro laborista australiano, Kevin Rudd, sin dejar de cumplir el tradicional compromiso estratégico de su país con Estados Unidos, ha rechazado de plano el incremento de su contingente militar en Afganistán. Desde su arribo al poder, en diciembre de 2007, su política se ha dirigido a mejorar las relaciones con sus vecinos asiáticos, deterioradas durante el mandato de su predecesor en el cargo, el conservador John Howard.
* Profesor titular de Ciencias Políticas, Universidad Jean-Moulin - Lyon-III.
Traducción: Florencia Giménez Zapiola
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