El «lumpen-radicalismo» del presidente Jacob Zuma

Por Achille Mbembe*

"Un gobierno para todos los sudafricanos", prometió el nuevo presidente del país, Jacob Zuma, tras su victoria electoral del 22 de abril de 2009. Tan carismático como enigmático, quien dirige ahora la primera potencia económica del continente negro deberá hacer frente a una sociedad carcomida por las desigualdades y la criminalidad, que no ha podido superar aún la pesada herencia del apartheid. Deberá también responder a la crisis que atraviesa su partido, el Congreso Nacional Africano (CNA), debilitado por las tensiones internas.

* Profesor de Historia y de Ciencia Política en la Universidad del Witwatersrand, Johannesburgo. Autor de Critique de la raison nègre, La Découverte, París, 2013.

Traducción: Lucía Vera

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