Una grieta que amenaza a India
Por Wendy Kristianasen (enviada especial)*
Un mes después de los ataques del 26 de noviembre a los hoteles de lujo de Bombay, la población india sigue traumatizada. En busca de culpables, el primer ministro Manmohan Singh había señalado enseguida a Pakistán. Desde entonces la presión sobre Islamabad se acentuó. Singh tenía claras intenciones geopolíticas, pero buscaba también evitar un enfrentamiento interno entre las comunidades musulmana e hindú.
* Periodista.
Traducción: Lucía Vera
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